Calefactores

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¿Es el calefactor por infrarrojos una alternativa de calidad?

Las variedades que funcionan con gasoil, gas o corriente eléctrica presentan no pocos inconvenientes, comunes a los denominados métodos de calefacción convencional, que generan calor mediante un circuito de aire seco, levantando una gran polvareda sobre los elementos circundantes y el suelo, favoreciendo, por otro lado, la aparición de moho. Además de todo ello, los métodos de calefacción convencionales requieren un alto consumo de energía, que es indudablemente un aspecto a tener en consideración a la hora de escoger la mejor opción de calefacción. Éste es uno de los motivos que lleva a muchos compradores a decantarse por los calefactores por infrarrojos, que ofrecen numerosas ventajas frente a los calefactores convencionales. Una de las razones por las que los compradores se deciden por nuestros calefactores por infrarrojos es el hecho de que suponen un complemento ideal de calefacción dentro de las cuatro paredes de su hogar, que se contrapone totalmente a los calefactores eléctricos, que implican un gasto muy superior, tanto desde el punto de vista energético como del económico.

Razones por las que comprar un calefactor por infrarrojos

Los calefactores por infrarrojos presentan numerosas ventajas frente al resto de tipos de calefactores que han venido utilizándose tradicionalmente. Partiendo del hecho de que se trata de un calentamiento mediante rayos infrarrojos y no de los métodos convencionales de calentamiento, desaparecen todas las consecuencias negativas de los métodos de calentamiento mediante alimentados por corriente eléctrica, por gasoil o por gas. Otro de los aspectos negativos que se eliminan con estos eficientes calefactores por infrarrojos son los circuitos de aire, que perjudican las condiciones del aire que respiramos. Además, se eliminan las condiciones favorables para la aparición de moho y el esparcimiento de polvo. Resulta especialmente indicado para personas con problemas de alergia o de asma. Los métodos de calefacción tradicionales generan aire caliente que se desplaza hacia la parte superior de las estancias, mientras que el aire frío tiende a bajar, lo que ocasiona que aumente la temperatura corporal en la cabeza, mientras que los pies se enfrían. Los calefactores por infrarrojos actúan tanto sobre las paredes como sobre el ambiente, por lo que se experimenta una sensación de calor uniformemente distribuido. El calor desprendido por los rayos infrarrojos incide en mayor profundidad en nuestro organismo a través de nuestra piel que en el caso de los otros tipos de calefacción, lo que se traduce en que podrá regular el termostato de su aparato de calefacción hasta a 2 ºC menos que si se tratara de alguno de los otros tipos de radiadores para obtener la misma sensación térmica, ya que la sensación de aumento de la temperatura corporal se experimenta en mayor grado mediante esta novedosa tecnología. Pero no es la única ventaja a tener en cuenta, ya que todo ello supone, por un lado, ahorro económico en su economía doméstica, y no sólo de manera inmediata, debido a su precio de venta muy asequible, sino también en cuanto al consumo; por otro lado, es una opción perfecta en cuanto a aprovechamiento y ahorro de espacio en cualquier estancia de su hogar.

¿Cómo funciona un calefactor por infrarrojos?

Los calefactores por infrarrojos se alimentan de corriente eléctrica, que se transforma en rayos infrarrojos por calentamiento. A diferencia de la tecnología utilizada en el caso de los radiadores convencionales, en este tipo de calefactores los rayos infrarrojos se calientan mediante ondas, que no calientan directamente el aire sino las superficies en las que se apoyan, desde donde se distribuye el calor uniformemente por toda la estancia, de manera que el calor penetra en nuestra piel y experimentamos una sensación semejante a la de tumbarse al sol o la de permanecer en un espacio con estufa de cerámica.

¿Es realmente efectivo este tipo de calefacción por rayos infrarrojos?

La eficiencia de los calefactores por infrarrojos es muy superior a la que pueden ofrecer otro tipo de sistemas de calefacción convencionales. Aproximadamente el 86 % de la energía que se utiliza para el calentamiento en los radiadores convencionales es consumida también para su transformación en rayos infrarrojos en el caso de estos eficientes calefactores. En el caso de los radiadores de gasoil el porcentaje de energía utilizada de manera eficiente no supera el 80 %. Uno de los recursos de los radiadores energéticamente más eficientes son las superficies sobre las que se instalan. Por un lado, es determinante la composición de la pared o el mueble al que el radiador irá fijado, ya que existen grandes diferencias en cuanto la conductividad del calor entre los diferentes materiales. Por otro, un espacio vacío es mucho más difícil de calentar que uno provisto de numerosos muebles y elementos sobre los que poder irradiar infrarrojos que distribuirán el calor por toda la habitación.

¿Cómo se calientan los radiadores por infrarrojos?

La temperatura máxima de estos calefactores varía según el fabricante y el modelo de que se trate.

¿Son peligrosos los calefactores por infrarrojos?

Los calefactores por infrarrojos son considerados inocuos. Se trata de la misma radiación que los rayos del sol, que son esenciales para la vida humana. De hecho, los rayos infrarrojos contribuyen a fortalecer el sistema inmunológico y provocan una sensación agradable en nuestro organismo.

¿Cómo y dónde instalar los radiadores por infrarrojos?

Estos radiadores se instalan en muchas ocasiones en espacios amplios y sobre superficies de grandes dimensiones, tales como invernaderos, cuadras, polideportivos, campos de fútbol, etc. Aunque también en su propio hogar se puede aprovechar al máximo todo el potencial de este tipo de aparatos, simplemente teniendo en cuenta algunos aspectos, tales como el asegurarse de que tanto las paredes como las ventanas del espacio en el que se desean instalar los radiadores están perfectamente aisladas, evitando así que se pierda energía. Tenemos disponibles radiadores de diferentes tipos y formas. Los modelos más modernos son muy cómodos de transportar; los hay también con apariencia de espejo o esférica, por ejemplo, lo que los hace aparatos muy versátiles y adecuados para diferentes estancias. Muchos modelos permiten incluso combinar varias superficies de instalación. Pueden instalarse a tanta altura como desee. Han de coincidir los contornos de las diferentes superficies de calentamiento. De igual manera, la ubicación del radiador dependerá de la de su fuente de alimentación.

Conclusión: Los radiadores por infrarrojos son un complemento útil y decorativo para su hogar, que le ofrecen numerosas ventajas, tales como la sensación de calor y bienestar, el refuerzo de su sistema inmunológico y un mejor funcionamiento de su sistema circulatorio. Puede, además, adquirirlos por un bajo precio, su instalación es sencilla y posible sobre muy diferentes superficies. Aunque no todas son ventajas: es posible que si ha decidido huir de los antiestéticos modelos de radiadores convencionales, al optar por un radiador por infrarrojos tampoco encuentre uno que se adapte a sus necesidades estéticas.